Para que una mujer que ha sido víctima de violencia psicológica pueda obtener justicia, debe enfrentarse a un proceso penal con muchos obstáculos en el camino. Uno de los principales problemas que enfrenta el abuso psicológico es que los hechos están abiertos a interpretación y dependen del contexto en el que tuvieron lugar.
Por ello, la víctima debe someterse a un proceso en el que debe declarar acerca del abuso múltiples veces y con distintas personas, lo que puede agravar el daño emocional y psicológico que ya ha sufrido. De acuerdo con De León, “la intervención de los operadores de justicia (una y otra vez) es revictimizante en cada etapa del proceso”.
Desde la perspectiva judicial, la abogada Jessica López afirma que se necesita un sistema de justicia en el que no sea necesario que la mujer se revictimice mientras se presenta a las audiencias al lado a la persona que la violentó. La Corte Interamericana de Derechos Humanos define que la victimización secundaria sucede “cuando el daño sufrido por la víctima es incrementado como consecuencia de su contacto con el sistema de justicia”.
Este es uno de los factores por los cuáles es muy difícil que se logre una sentencia, ya que, en muchas ocasiones, las mujeres desisten del proceso con el fin de no tener que revivir el trauma. Irma López de Fundación Sobrevivientes indica que “en el caso penal las mujeres desisten mucho porque es bastante desgastante; los procesos legales son muy tediosos y las víctimas empiezan a no creer ni en la justicia ni en las autoridades”.
“Tenemos un sistema al que le falta mucho enfoque de género, pues falta mucha sensibilización hacia las víctimas. Por ejemplo, tuvimos un caso de una señora indígena que sufría violencia psicológica y la reparación que ella buscaba era que su agresor le devolviera su indumentaria; mientras que el juez le solicitó que le presentara todas las facturas que comprobaran que ella había adquirido por su cuenta la vestimenta. Claramente este testimonio demuestra que no tienen enfoque de género ni de interculturalidad. Hay muchos cuellos de botellas para que las mujeres obtengan justicia.” -Irma López, Fundación Sobrevivientes.